En una medida sin precedentes, el Tribunal Constitucional de Bulgaria ha mandado realizar un recuento de los votos de las elecciones celebradas el pasado 27 de octubre, tras descubrir irregularidades en un alarmante 8% de los colegios electorales del país. Esta decisión podría tener un impacto significativo en la composición del Parlamento búlgaro, afectando directamente al resultado de varios partidos.
La noche anterior, el tribunal había otorgado permiso para examinar detenidamente las actas de 2.200 de los 13.000 colegios electorales en Bulgaria, nación caracterizada por enfrentarse a serios desafíos de corrupción y considerada una de las economías más débiles dentro de la Unión Europea. Este examen reveló irregularidades en prácticamente la mitad de los colegios revisados, una cifra que ha alarmado a los observadores nacionales e internacionales.
La solicitud para esta revisión electoral fue iniciada por dos integrantes de la coalición de gobierno de Bulgaria: el Partido Socialista (BSP) y el partido populista ITN. Además, los partidos opositores Continuamos con el cambio – Bulgaria Democrática, Resurrección y Grandeza, siendo estos últimos de tendencia ultranacionalista, se unieron a la petición. Este hecho marca un raro momento de unidad entre distintas facciones políticas, todas preocupadas por la integridad del proceso electoral.
Tal medida podría beneficiar especialmente al partido Grandeza, que no logró obtener representación en el Parlamento por un estrecho margen en el conteo inicial de votos. Dado que Bulgaria ha celebrado siete elecciones en tan solo tres años y medio, este recuento podría ser decisivo para estabilizar la política del país.
Los resultados de este recuento son esperados con gran ansiedad, ya que podrían reconfigurar el equilibrio de poder dentro de Bulgaria, un país que lucha por superar divisiones políticas y avanzar hacia una mayor estabilidad y prosperidad. La decisión del Tribunal Constitucional subraya la importancia de la transparencia y la confianza en el sistema electoral, elementos esenciales para la democracia en cualquier nación.
