El Consorcio de la Ciudad de Cuenca ha alcanzado una significativa efeméride al cumplir 20 años desde su creación. Este organismo, que juega un papel vital en la conservación del patrimonio de la ciudad, ha decidido realizar una revisión del emblemático Puente San Pablo, el primer proyecto que recibió al momento de su fundación. Mariano Teruel, gerente del Consorcio, hizo este anuncio durante una visita a las obras de la UNED en Cuenca, donde también abordó la importancia del Consorcio para la gestión del patrimonio local.
Teruel destacó que el Consorcio ha sido un instrumento fundamental para todas las administraciones y que, en dos décadas, ha invertido casi cien millones de euros en proyectos de conservación y mejora en la ciudad. Sin esta aportación financiera, subrayó, sería difícil mantener el patrimonio cuencano en el estado en que se encuentra actualmente.
Un ejemplo concreto de esta labor es la inversión de 2,5 millones de euros en un tramo de poco más de cien metros que conecta el edificio de la UNED con la iglesia de la Virgen de la Luz y el Puente de San Antón. Este tipo de inversiones revela el compromiso del Consorcio con la preservación del entorno histórico de Cuenca.
El gerente del Consorcio recordó que la primera acción realizada por esta entidad fue un estudio de la estructura del Puente San Pablo. Ahora, en el marco de su vigésimo aniversario, se llevará a cabo un nuevo estudio para evaluar el estado actual del puente, un símbolo de la ciudad. A pesar de que siempre existen críticas, Teruel confía en que la labor del Consorcio es bien valorada por la comunidad.
De cara al futuro, el reto que se presenta es ambicioso: Teruel expresó su deseo de conseguir otros cien millones de euros para invertir en el desarrollo y la conservación de Cuenca, lo que implicaría un impulso significativo para el patrimonio y los proyectos culturales de la ciudad.