El consejero de Sanidad de Castilla-La Mancha, Jesús Fernández Sanz, ha subrayado la permanente colaboración y contribución de la comunidad autónoma en la evolución y mejora del Sistema Nacional de Salud en España. Dicha afirmación se dio lugar durante una jornada temática que tuvo lugar bajo el enfoque de ‘Mejoras del Sistema Nacional de Salud’, auspiciada por el Consejo de Colegios de Médicos de Castilla y León.
La jornada contó con la presencia y participación de los consejeros de Sanidad de Castilla y León, Cantabria y La Rioja, quienes, junto a Fernández Sanz, debatieron puntos críticos tales como la Atención Primaria, la gestión de la cronicidad, los desafíos demográficos en términos médicos, la financiación de la sanidad, la política farmacéutica y la revolución digital en el ámbito salud. Estas discusiones fueron parte de la agenda como se reportó en una nota de prensa oficial de la Junta.
Fernández Sanz describió el Sistema Nacional de Salud como «fantástico con 17 motores diferentes», aunque reconoció aspectos pendientes como la necesidad de «consolidar lo existente» y promover una clave de transformación mediante mejoras en la gobernanza, un cambio de modelo y la inducción de la innovación, focalizando el diálogo más «en salud que en sanidad».
Al ser inquirido sobre un hipotético acuerdo en materia de sanidad, el consejero reiteró la importancia de la adecuación financiera como condición sine qua non para cualquier pacto futuro. Manifestó que es imperante modificar el sistema de financiación per cápita existente, considerado perjudicial para comunidades con distribución poblacional dispersa, como es el caso de Castilla-La Mancha.
El consejero sostuvo que es preciso disponer de una cartera de servicios comunes y asignar un incremento de un punto porcentual del Producto Interior Bruto para poder respaldar económica y adecuadamente las políticas sanitarias. Adicionalmente, Fernández Sanz reveló que la cronicidad y la pluripatología son problemas emergentes en los servicios de salud que, citando datos en Castilla-La Mancha, afecta aproximadamente al 30% de la población y ocasiona que dichos pacientes consuman hasta el 80% de las consultas en Atención Primaria de la región.
En cuanto a la digitalización de la atención sanitaria, el consejero reconoció la necesidad de manejar adecuadamente las herramientas digitales a pesar de los evidentes riesgos en seguridad. Según él, trabajar hacia una revolución digital integral es una misión prioritaria que deberá ir de la mano con formación especializada, la cual debería traducirse en mejoras tangibles en los resultados de salud para los ciudadanos.
