El Ayuntamiento de Toledo ha manifestado su inquietud ante las tensiones que han surgido entre Emiliano García-Page, secretario general del PSOE de Castilla-La Mancha y presidente regional, y Óscar Puente, ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, tras el reciente Comité Federal del PSOE. La preocupación radica en que estas desavenencias pudieran repercutir negativamente en el proyecto del AVE en Toledo, que forma parte del trazado Madrid-Extremadura.
Juanjo Alcalde, portavoz del equipo de Gobierno municipal, ha enfatizado que «ningún toledano podría entender» que la relación personal entre dos altos dirigentes del mismo partido pudiera poner en peligro un proyecto tan significativo para la ciudad. Durante una rueda de prensa, Alcalde expresó que la idea de que una «enemistad personal» pudiera afectar a un asunto de tal envergadura sería «el colmo de la irresponsabilidad política».
El portavoz confía en que dichos problemas no prosperen y afirmó que el Ayuntamiento espera con interés las alegaciones relacionadas con el proyecto. Alcalde subrayó que se ha estado trabajando en colaboración con la Junta de Comunidades, ya que es del interés común que el AVE llegue a Toledo.
En su intervención, Alcalde remarcó que la opción propuesta por el Ayuntamiento, que fue aceptada por la Junta, es más económica y respetuosa con el patrimonio, además de garantizar la protección de las «líneas rojas de la estación en Santa Bárbara». Destacó que esta alternativa representa una solución positiva para todas las partes involucradas.
El portavoz concluyó su declaración reafirmando que no entenderían que un desacuerdo personal pudiera hacer descarrilar un proyecto de vital importancia tanto para la ciudad como para el país, y se mostró optimista respecto a que puedan llegar a un acuerdo entre el Gobierno, la Junta y el Ayuntamiento «por el bien de los españoles».