El centro de acogida para personas sin hogar ‘El Pasico’, ubicado en la carretera de las Peñas, a 10 kilómetros de Albacete, conmemoró este lunes su 20 aniversario, un hito significativo en un proyecto que ha ofrecido refugio a más de 500 personas a lo largo de su historia.
Durante la celebración, la consejera de Bienestar Social, Bárbara García, visitó las instalaciones y expresó su felicitación a la ONG Medicus Mundi, responsable de la gestión del centro, por su papel como «recurso residencial para las personas que más lo necesitan y que no cuentan con alternativas». García subrayó el compromiso del Gobierno regional de reducir a la mitad la situación de personas sin hogar para el año 2030, destinando 19 millones de euros a este objetivo y anunciando la creación de nuevos recursos residenciales, como el centro que se inauguró en Guadalajara la semana pasada.
La consejera destacó que en Castilla-La Mancha actualmente se encuentran en funcionamiento 54 recursos habitacionales, con un total de 483 plazas disponibles para atender a las personas más vulnerables. En este sentido, García hizo hincapié en la importancia de que proyectos como ‘El Pasico’, que ha sido calificado como un «referente», también fomenten la inclusión laboral y social, permitiendo que las personas puedan «desarrollar el proyecto de vida que se merecen». Asimismo, se comprometió a continuar con la financiación de la organización, destinada a mantener anualmente 122.000 euros.
En su intervención, la consejera también se refirió a la reciente presentación de un recurso por parte del Gobierno de Castilla-La Mancha al Real Decreto Ley sobre la acogida de menores no acompañados residentes en Canarias, criticar la falta de consenso y colaboración en la redacción de medidas que considera perjudiciales para la protección de estos menores. García reafirmó el compromiso del Gobierno regional con la atención de menores no acompañados y a su vez insistió en la necesidad de un aumento de financiación para garantizar un tratamiento equitativo en su atención.
Por su parte, la vicepresidenta de Medicus Mundi Sur, Josefa Martínez, agradeció el apoyo de la Junta de Castilla-La Mancha mediante subvenciones que permiten mantener el proyecto. A través de talleres de formación en oficios como albañilería o pintura, se busca mejorar la vida laboral de inmigrantes y personas en riesgo de exclusión social que enfrentan dificultades para acceder a una vivienda.
El coordinador del proyecto ‘El Pasico’, Cheikhou Cissé, también intervino para abordar el creciente problema de los asentamientos irregulares en Albacete, que afecta principalmente a migrantes jornaleros. Cissé enfatizó la necesidad de un diálogo entre las instituciones para abordar esta problemática y resaltó la responsabilidad de las empresas de trabajo temporal en la gestión de estos trabajadores, que a menudo se ven obligados a residir en condiciones precarias al margen de la ley. Además, solicitó una revisión de la normativa en Albacete sobre las condiciones de habitabilidad de los temporeros, abogando por su cumplimiento para mejorar la situación de estos trabajadores.
