El fin de semana trajo consigo un desafío para el BSR Puertollano al enfrentarse al equipo de UCAM Murcia en lo que fue la tercera jornada de liga, un encuentro que se desarrolló en el pabellón Santiago Cañizares de Puertollano ante la mirada de un centenar de aficionados. Este partido se presentaba como una difícil prueba para los locales, dado que nunca habían conseguido una victoria frente a Murcia, un equipo que, a pesar de tener un partido menos, es considerado uno de los favoritos para ocupar los primeros puestos de la tabla. El escenario estaba preparado para un duelo en el que el BSR Puertollano aspiraba a lograr su primera victoria de la temporada, apoyándose en el ánimo de su afición y la estrategia planteada por su entrenador, Pablo Sendarrubias.
A pesar de un comienzo esperanzador para los de Puertollano, que se adelantaron en el marcador con la primera acción del partido, el equipo de UCAM Murcia rápidamente impuso su ritmo, ejecutando un juego que buscaba resolver el encuentro de manera rápida. Con estrategias enfocadas en ataques veloces y una sólida defensa centrada en neutralizar a Zavala, el máximo anotador de los locales, Murcia no solo logró controlar el partido sino que también comenzó a distanciarse en el marcador, evidenciando la profundidad y calidad de su plantilla frente a un equipo de Puertollano que luchaba por encontrar su lugar en el juego.
El desarrollo del encuentro mostró la superioridad del UCAM Murcia en todos los aspectos del juego, manteniendo una consistencia que les permitió ampliar su ventaja durante la segunda mitad. A pesar del esfuerzo y la determinación del BSR Puertollano por permanecer competitivos, el resultado final reflejó la diferencia entre ambos equipos. Este partido subraya las realidades del deporte profesional, donde el equipo de Puertollano, a pesar de las adversidades, continúa enfocado en competir y disfrutar del baloncesto, resaltando el espíritu de superación y la pasión por el juego que define a sus jugadores y afición.