En un inesperado giro de acontecimientos en el panorama televisivo español, el programa «Reacción en cadena» de Telecinco se vio forzado a despedir a sus prometedores participantes, Cónclave de Huelva, después de que un nuevo grupo de concursantes, la Familia Fanaleros de Barcelona, los derrotara en una emocionante contienda. Este cambio marca el fin de un impresionante recorrido para los jóvenes andaluces que habían cimentado su lugar como estrellas emergentes en el concurso, emitido de lunes a viernes a las 20:00 horas y comandado por Ion Aramendi.
La jornada del lunes, 30 de diciembre, concluyó la racha victoriosa del Cónclave de Huelva en su decimonovena aparición en el programa, cuando fueron superados por un suspiro de diferencia por la Familia Fanaleros en el segmento «Complicidad ganadora». Los andaluces, que justo en su episodio anterior habían superado el umbral de los 100.000 euros, sumando un total de 26.750 euros para alcanzar los 119.471 euros, se vieron obligados a ceder su trono a los desafiantes catalanes.
La derrota se selló con una pequeña diferencia de un acierto, un momento que Aramendi resumió con un elogio hacia el esfuerzo del trío saliente: «¡Atención, tenemos nuevo equipo campeón! Enhorabuena, chicos. Ha sido un placer teneros aquí. No ha podido ser». Esta salida no solo marca el fin del reinado de Cónclave de Huelva sino que también pone de manifiesto la naturaleza impredecible y emocionante de «Reacción en cadena».
Tras su exitoso paso por el programa, Inés, Ezequiel y Juanbar, amigos de la infancia que conforman Cónclave de Huelva, se preparan ahora para disfrutar de los frutos de su participación. Con planes para realizar un pequeño viaje juntos, con Egipto entre sus posibles destinos, el trío seguramente recordará su experiencia en Telecinco como un capítulo gratificante de su vida.
Sin embargo, la suerte de los recién llegados, Familia Fanaleros, compuesta por Sandra, junto a su pareja Óscar y su prima Marina, empezó de manera muy distinta, habiendo acumulado solo 1.532 euros tras enfrentarse a «La última cadena» con un bote de inicio de 98.000 euros. Este cambio de guardia en «Reacción en cadena» es un recordatorio de que, en el ámbito de los concursos televisivos, las fortunas pueden cambiar con rapidez, dejando al público expectante por ver cuánto tiempo la Familia Fanaleros podrá mantenerse en la cima.
Este episodio añade otro capítulo vibrante a la historia de «Reacción en cadena» y mantiene a la audiencia de Telecinco enganchada, demostrando una vez más el atractivo de los concursos televisivos y su capacidad para unir a los espectadores en torno a competiciones cargadas de tensión, emoción y, sobre todo, la incertidumbre de qué equipo será el próximo en batir un récord o caer derrotado.