Las empresas pueden contaminar lo que quieran llegó a decir el ahora presidente de Argentina
Habitantes de Villa Inflamable, en el partido de Avellaneda, fueron sorprendidos esta mañana al observar cómo el arroyo Sarandí adquiría un intenso color rojo. Este fenómeno, que generó alarma en la comunidad, provocó la movilización de diversas autoridades y reavivó las denuncias por contaminación en la zona.
Reacciones vecinales y sospechas de contaminación
Imágenes del arroyo teñido de rojo comenzaron a circular rápidamente en redes sociales, acompañadas de comentarios que evidencian la preocupación de los vecinos por el impacto ambiental. La zona, cercana a destilerías e industrias, ha sido señalada en reiteradas ocasiones por vertidos ilegales. En esta ocasión, las sospechas apuntan a la presencia de anilina, un compuesto utilizado en industrias textiles y curtiembres.
Según María Ducomls, vecina de la zona, no es la primera vez que el agua del arroyo cambia de color. “El agua ha estado gris, verde, violeta y azulada. Esto sucede cuando camiones cisterna llegan a una empresa de tratamiento de residuos. Estamos cansados de que no haya control”, denunció. Otros vecinos, como Claudia, resaltaron que la falta de agua potable y la persistente contaminación han hecho que se sientan olvidados.
Acción de las autoridades
Desde la Municipalidad de Avellaneda, se informó que se tomaron muestras del agua y se presentó una denuncia ante la Autoridad del Agua, que dependerá del Ministerio de Infraestructura bonaerense para investigar el origen del vertido. Asimismo, se solicitó la intervención del Ministerio de Ambiente provincial, que desplegó un laboratorio móvil para analizar las muestras y determinar qué sustancia causó el enrojecimiento del agua.
El olor nauseabundo que emana del arroyo, sumado a los residuos visibles en su superficie, aumenta la preocupación. “El agua en estas condiciones es un riesgo para humanos, animales y el medio ambiente”, destacaron las autoridades.