El alcalde de Ciudad Real, Francisco Cañizares, ha mostrado su satisfacción tras la decisión del Gobierno de España de no proceder con la instalación de un centro temporal de acogida de migrantes en las instalaciones del aeropuerto de la ciudad. Cañizares ha afirmado que esta resolución es fruto de las numerosas gestiones realizadas por el equipo de Gobierno que lidera y de las iniciativas impulsadas por el Partido Popular en diversas instancias, incluyendo el Congreso, el Senado y las Cortes regionales.
Durante el Comité Ejecutivo Regional del Partido Popular, celebrado en Ciudad Real, el alcalde destacó la importancia de esta decisión, calificándola como un triunfo para la ciudad y afirmando que evitará la llegada de «un proyecto terrible» que describió como un «campo de concentración». Cañizares enfatizó que esta medida responde al rechazo unánime que la idea había suscitado en la sociedad ciudadrealeña. «Hemos conseguido que el Gobierno de España dé marcha atrás a lo que era un proyecto no posible, sino cierto», indicó ante miembros del Partido Popular de Castilla-La Mancha.
El alcalde también subrayó la importancia de trabajar para alcanzar «el consenso de la sociedad ciudadrealeña». En su intervención, Cañizares remarcó que el Ayuntamiento de Ciudad Real ha logrado «doblar la mano al Gobierno de España» en una decisión que consideró «contraria a los derechos humanos» y que habría impactado negativamente en la imagen y progreso de la ciudad, dificultando la atracción de inversiones y el aprovechamiento pleno de las instalaciones.
Finalmente, Cañizares lamentó la falta de apoyo del Grupo Socialista en el Ayuntamiento y también criticó al subdelegado del Gobierno, David Broceño, a quien acusó de desempeñar «un papelón» por no haber actuado ante la situación, a pesar de tener conocimiento de los planes relacionados con el aeropuerto.