La campaña de control y vigilancia del tráfico por parte de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil realizada en diciembre de 2023 en la provincia de Toledo arrojó significativos resultados. Durante dicho periodo, 3.921 pruebas de alcoholemia se llevaron a cabo, de las cuales el 1,61% resultaron positivas. En el ámbito del control de drogas, de las 60 pruebas practicadas, el 36,67% dieron positivo.
Estos datos, proporcionados por la Delegación del Gobierno en una nota de prensa, se dan a conocer en el contexto del inicio de una nueva campaña especial de vigilancia de la Dirección General de Tráfico (DGT) este lunes, 19 de agosto. La campaña se extenderá hasta el domingo 25 de agosto y reforzará los servicios de control y vigilancia del tráfico por parte de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil. Además, se contará con la colaboración de las policías municipales que se sumen a la iniciativa, con un enfoque especial en el consumo de alcohol y otras drogas en las vías de circulación.
La nota de prensa también subraya la importancia de la colaboración de las policías locales en los datos recabados durante el pasado mes de diciembre, permitiendo así extender los controles al ámbito urbano. Hasta la fecha, los Ayuntamientos de Toledo y Méntrida han confirmado su adhesión a la campaña. Estas localidades, junto con la Agrupación de Tráfico en las vías interurbanas, intensificarán los controles de alcoholemia y drogas en sus respectivas áreas de competencia.
En el primer semestre del año, la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil ha formulado un total de 653 denuncias en el ámbito de la DGT en Toledo, con 241 denuncias por sobrepasar las tasas de alcohol y 412 denuncias por presencia de drogas.
Estudios recientes realizados en 2023 muestran un ligero cambio en la tendencia detectada en años anteriores: hay menos casos de positivos a alcohol entre los conductores que fallecieron en siniestros viales en 2023, pero sus autopsias revelan más presencia de drogas de abuso y psicofármacos en la carretera.
Las campañas de control y vigilancia sobre los factores de riesgo relacionados con el consumo de alcohol y otras drogas son cruciales en el ámbito de la seguridad vial. Estas sustancias no sólo incrementan el riesgo de sufrir siniestros durante la conducción, sino que también aumentan la gravedad de las lesiones en los accidentados. No hay que olvidar que el alcohol es el segundo factor concurrente más habitual en los siniestros de tráfico, especialmente en aquellos con víctimas mortales.