Un funcionario estadounidense ha revelado que el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán había planeado asesinar a la embajadora de Israel en México, Einat Kranz Neiger, a finales del año pasado. Esta trama, que fue neutralizada por los servicios de seguridad mexicanos, no representa una amenaza actual, según se informó. La operación es vista como parte de una serie de ataques que Irán ha perpetrado contra diplomáticos, disidentes y opositores en varias partes del mundo.
Los funcionarios han destacado que esta amenaza en particular es un ejemplo más de la «extensa red» de operaciones que Irán mantiene en el extranjero, enfocándose en objetivos estadounidenses e israelíes. El plan de ataque, que se puso en marcha a finales de 2024, fue frustrado en el verano en México, gracias a la intervención de las autoridades locales. Israel ha expresado su agradecimiento a México por su pronta acción en desarticular lo que describió como «una red terrorista».
Ante este contexto, el Ministerio de Exteriores israelí ha asegurado que sus agentes continuarán colaborando con agencias globales para contrarrestar cualquier amenaza terrorista que surja de Irán y sus aliados. Esta situación resalta cómo las tensiones geopolíticas y la lucha contra el terrorismo se manifiestan en regiones que, a menudo, se consideran alejadas de los focos tradicionales de conflicto.
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