El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció la incautación de un gran petrolero cerca de las costas de Venezuela, acción que intensifica la relación ya tensa entre ambas naciones. Durante un evento en la Casa Blanca, Trump destacó que esta operación, liderada por la Guardia Costera, marca un hito al ser la mayor incautación de este tipo. Aunque el presidente no reveló detalles sobre la identidad del buque o la bandera bajo la cual navegaba, esta medida se enmarca dentro de un contexto más amplio de confrontación que ha caracterizado la política estadounidense hacia Venezuela en los últimos meses.
La incautación se produce en un momento crítico, ya que Venezuela ha logrado exportar más de 900,000 barriles de petróleo diarios, la cifra más alta en lo que va del año. A pesar de la creciente presión sobre el presidente Nicolás Maduro, Estados Unidos había mantenido hasta ahora una postura de no intervención directa en el flujo petrolero del país sudamericano. Sin embargo, la ofensiva de Trump contra el narcotráfico en la región ha llevado a un despliegue militar considerable, con la presencia de portaviones y tropas en el Caribe que sugieren la posibilidad de una acción militar más contundente.
En medio de esta escalada, el presidente venezolano ha hecho un llamado al pueblo estadounidense para frenar lo que considera una «mano enloquecida» que amenaza con llevar la guerra al Caribe. Trump, por su parte, continúa tildando a Maduro de «líder ilegítimo» y vinculándolo con redes de narcotráfico, lo que le otorga un mayor marco legal para acciones militares. La situación sigue siendo incierta, y tanto Washington como Caracas parecen estar cerrando filas en una confrontación que podría tener repercusiones significativas en la región.
Artículo resumido que puedes leer completo aquí
