El presidente Donald J. Trump ha declarado oficialmente el estado de emergencia en el estado de Kentucky, en respuesta a las severas condiciones climáticas que han afectado a la región desde el 14 de febrero de 2025. Esta declaración autoriza la movilización de recursos federales para complementar los esfuerzos de respuesta a nivel estatal y local ante desastres naturales que incluyen tormentas severas, vientos en línea recta, inundaciones y deslizamientos de tierra.
La acción del presidente permite que el Departamento de Seguridad Nacional y la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) coordinen todos los esfuerzos de socorro en caso de desastre. De acuerdo con la normativa establecida en el Título V de la Ley Stafford, FEMA estará en condiciones de proporcionar asistencia adecuada para medidas de emergencia necesarias con el objetivo de salvar vidas, proteger bienes y garantizar la salud y seguridad públicas, así como mitigar o evitar la amenaza de futuras catástrofes en los 120 condados de Kentucky afectados por la crisis.
La coordinación de las operaciones de recuperación federales en las áreas impactadas estará a cargo de Jeremy Slinker, un representante de FEMA designado para supervisar los esfuerzos de ayuda. La agencia tiene la facultad de identificar y movilizar los equipos y recursos que considere necesarios para aliviar los efectos de la emergencia, con el compromiso de financiar hasta el 75% de las medidas de protección de emergencia a través de asistencia federal directa.
Los residentes de Kentucky ahora pueden esperar una respuesta más coordinada gracias a esta declaración de emergencia, que busca no solo proporcionar asistencia inmediata a aquellos en necesidad, sino también poner en marcha acciones a largo plazo para recuperarse de los estragos causados por los fenómenos climáticos extremos. Para más información, los medios de comunicación pueden contactar directamente con la sala de prensa de FEMA.
Fuente: WhiteHouse.gov
