El Juzgado de Instrucción número 1 de Guadalajara ha decidido el sobreseimiento provisional de la denuncia presentada por el sindicato CCOO ante la Fiscalía, relacionada con la quema de la bandera arcoíris que fue colocada en su balcón para conmemorar el Día contra la Lgtbifobia. Esta acción, llevada a cabo hace casi un año, provocó la indignación del sindicato, que consideró que los hechos podrían constituir un delito de odio y discriminación.
En su momento, CCOO organizó una concentración de manera urgente frente a las puertas del sindicato para manifestar su repulsa ante lo ocurrido. A pesar de estos esfuerzos, el juez ha determinado, según un auto al que tuvo acceso Europa Press, que no hay suficientes motivos para acusar a ninguna persona como autora, cómplice o encubridora de la quema.
El secretario provincial de CCOO en Guadalajara, Javier Morales, ha expresado su decepción ante el archivo del procedimiento, resaltando la falta de pruebas que impidieron la identificación de los responsables. «Es una lástima porque podría haber servido como una medida disuasoria», ha subrayado Morales, quien mantiene que una acción de esta naturaleza es un claro indicativo de un delito de odio.