Efectivos del Equipo Rádar del Destacamento de Tráfico de la Guardia Civil de Las Pedroñeras (Cuenca) han llevado a cabo la investigación de un varón de 32 años por un presunto delito contra la seguridad vial. Se le acusa de haber superado la velocidad máxima permitida en la vía en 93 kilómetros por hora, alcanzando los 213 km/h en una zona restringida a 120 km/h.
El incidente tuvo lugar en la autopista AP-36 (Ocaña–La Roda), en el término municipal de Las Pedroñeras, durante un control de velocidad estático efectuado por la Guardia Civil, tal y como se señaló en una nota de prensa emitida por el cuerpo de seguridad.
Con el soporte de la Unidad de Investigación de Siniestros Viales de Cuenca, se procedió a formular cargos contra el conductor. Las diligencias instruidas han sido remitidas al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de guardia de San Clemente (Cuenca).
Las posibles consecuencias legales para el conductor incluyen penas de prisión que oscilan entre los 3 y los 6 meses, multas de 6 a 12 meses, trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días y, en todos los casos, privación del derecho a conducir de 1 a 4 años.
Estas medidas de control de la velocidad forman parte de un plan más amplio del Sector de Tráfico de Castilla-La Mancha que tiene como objetivo la reducción de la siniestralidad grave en vías de doble carril.