Efectivos del Subsector de Tráfico de la Comandancia de la Guardia Civil de Cuenca realizaron una detención el pasado miércoles, que tuvo como resultado la aprehensión de un varón de 33 años acusado de exceder los límites de velocidad permitidos reglamentariamente.
Los hechos tuvieron lugar el mes pasado, cuando una patrulla en servicio llevaba a cabo labores de vigilancia y control de velocidad estática en la carretera N-420, dentro del término municipal de Boniches. Durante su recorrido, la patrulla detectó a un vehículo con matrícula española que circulaba a una velocidad excesiva.
El vehículo, que superaba ampliamente los límites de velocidad establecidos, fue detectado circulando a 181 kilómetros por hora, mientras que el límite permitido en esa zona era de 90 kilómetros por hora, según informó la Guardia Civil mediante un comunicado de prensa.
A pesar de los intentos de la patrulla por interceptar al infractor, el vehículo logró desviarse en un cruce antes de que la patrulla de notificadores pudiera cerrarle el paso. Ante esta situación, se solicitó la colaboración del Equipo GIAT (Grupo de Investigación y Análisis del Tráfico) del mismo Subsector de Tráfico de la Comandancia de la Guardia Civil de Cuenca.
El Equipo GIAT llevó a cabo las investigaciones necesarias para identificar y localizar al responsable de la infracción, logrando finalmente su ubicación. Como resultado, el conductor fue investigado como posible autor de un delito contra la seguridad vial por circular con exceso de velocidad. Se instruyeron las correspondientes diligencias penales.
En caso de ser declarado culpable, el conductor investigado podría enfrentarse a penas que oscilan entre los tres y los seis meses de prisión, o una multa de seis a doce meses, así como trabajos en beneficio de la comunidad de treinta y un días a noventa. Además, se le podría privar del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores durante un período de tiempo que va desde uno hasta cuatro años.
Las autoridades subrayaron la importancia de respetar las normas de tráfico y circular dentro de los límites de velocidad establecidos, ya que el exceso de velocidad pone en peligro la vida de los conductores, así como la de otros usuarios de la vía. La Guardia Civil continúa trabajando para garantizar la seguridad en las carreteras y sancionar a aquellos que incumplen la normativa vigente.