En la más reciente gala de Supervivientes All Stars, la tensión alcanzó su punto culminante al anunciarse a la nueva expulsada de la semana. Los porcentajes de apoyo entre Adara Molinero y Elena Rodríguez estuvieron muy reñidos, pero ambos se encontraron lejos de los otros nominados, dejando claro que el público tiene preferencias marcadas en esta edición.
Los votantes decidieron salvar a Tony Spina, novio de Marta Peñate, e Iván González, quienes captaron la mayor parte de los apoyos. Ambos participantes superaron el 50% de los votos, mientras que el porcentaje más bajo, un preocupante 7,1%, perteneció a otros concursantes que se desempeñan en la sombra de la notoriedad de sus compañeros.
Durante la gala, la audiencia tuvo que elegir entre dos figuras que comparten una base de seguidores similar, un hecho que añadió una capa de complejidad a la decisión final. Al final, fue Elena la que acumuló menos votos, siendo la expulsada de esta semana. Su salida provocó una mezcla de reacciones: mientras Adara rompía en lágrimas al despedirse de su madre, algunos seguidores del programa celebraron la eliminación.
En un giro inesperado, Elena dejó un marcado mensaje de despedida al transferir el recién instaurado ‘beso de Judas’ a Miri Pérez-Cabrero, un movimiento que no pasó desapercibido en la audiencia y que evidenció las tensiones acumuladas en la convivencia. Esta dinámica ha estado marcada por choques entre las concursantes, con Elena intentando involucrarse en conflictos previos, lo que, según algunos, pudo haber influido en el decreciente apoyo que recibió.
El principio de esta temporada ha llevado a muchas sorpresas y cambios rápidos, mientras tanto, se sigue esperando cómo se desarrollarán las relaciones y alianzas en la jungla. La incertidumbre y las emociones están a flor de piel, tanto para los concursantes como para los seguidores, que no se pierden un solo instante de este emocionante reality.