Existe un conflicto acerca del deslinde entre los municipio de Cuenca y Albarracín, el que según la última convocatoria que se celebró recientemente en el ayuntamiento de Albarracín, y en donde se ratificó el desacuerdo entre ambas partes, será el Instituto Geográfico Nacional (IGN) la entidad dependiente del Gobierno de España que se encargará de resolver este asunto.
Deslinde municipios de Cuenca y Albarracín
Este deslinde es una disputa ya centenaria, y según documentos, el mismo se remonta al siglo XIX. Debido a la línea de delimitación entre ambos municipios y entre las dos provincias, -Cuenca y Teruel- y entre las dos comunidades autónomas -Castilla-La Mancha y Aragón-.
A la convocatoria celebrada en Albarracín acudió la Comisión Municipal de Deslinde del Ayuntamiento de Cuenca que había sido nombrada a tal efecto, conformada por un concejal de cada grupo municipal y presidida por el edil Juan Manuel Martínez Melero por delegación del alcalde, con Pilar Aguilar como secretaria de la misma y Francisco Gómez Escribano como perito. Asimismo, formaban parte de la misma tres representantes de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
Litigio entre los mojones en Zafrilla y Checa
A lo largo de todos estos años desde que se iniciase el conflicto por el deslinde, sí se ha llegado a algunos acuerdos entre las partes con respecto a los puntos de delimitación entre ambos municipios, pero se mantiene el litigio entre los mojones ubicados en Zafrilla y Checa -sólo la parte interior, pues en estos dos espacios concretos sí hay acuerdo-.
La postura de Cuenca es que “el fenómeno físico que marque la división sea el accidente geográfico más importante de la zona, esto es, el nacimiento del río Tajo”, según explica el concejal Juan Manuel Martínez Melero.
Mientras que Albarracín defiende que sea el monte de Entredicho, que es de su propiedad. “El municipio de Albarracín aboga porque se priorice la propiedad y la gestión, mientras que en Cuenca consideramos que se debe mantener el criterio que se utilizó para otros puntos, como es el caso de Checa, en que es el Tajo el que se utilizó para determinar el límite”, añade el edil conquense.
Se trata de un asunto, continúa Martínez Melero, “que tiene su importancia a nivel de gestión del territorio, puesto que no solamente hablamos de los límites entre los municipios de Cuenca y Albarracín, sino también entre las provincias de Cuenca y Teruel y entre las comunidades de Castilla-La Mancha y Aragón”.
De este modo, se inicia ahora el procedimiento de resolución del litigio por el deslinde, que queda en manos del Gobierno de España que será quien lo resuelva según propuesta del IGN como estamento administrativo mediador superior.