El pasado mes de noviembre registró una significativa caída en el Índice de Precios Industriales (IPRI) en Castilla-La Mancha, disminuyendo un 6 por ciento en comparación con el mismo mes del año anterior, según datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Este porcentaje de descenso resultó ser 1,4 puntos inferior al promedio nacional, que observó una reducción más pronunciada del 7,4 por ciento.
La reducción de precios en Castilla-La Mancha representó el séptimo menor descenso a nivel nacional. Solo siete comunidades autónomas experimentaron incrementos, mientras que ocho vieron disminuir sus precios industriales y dos se mantuvieron sin variaciones.
En contraste, las mayores subidas se registraron en el País Vasco, Cantabria y la Comunitat Valenciana, con aumentos de 2,4, 2,3 y 1,4 puntos respectivamente. Por el lado de los descensos más acusados, Canarias, Andalucía e Illes Balears encabezan la lista con disminuciones de 1,8, 1,6 y 0,8 puntos.
En el plano anual, Castilla y León también reflejó una tendencia negativa en los precios industriales, reportando un descenso del 5,4 por ciento, cifra que queda 3,4 puntos por encima del promedio nacional.
A nivel nacional, esta caída de noviembre se suma a una serie de nueve meses consecutivos con tasas negativas en la inflación del sector industrial, rompiendo con una racha anterior de 26 meses de incrementos sostenidos. Durante ese periodo previo, se llegaron a observar incrementos significativos, con tasas positivas de dos dígitos durante más de 20 meses.
El comportamiento de los precios industriales en noviembre estuvo marcado principalmente por el sector energético, donde se registró un incremento de más de cuatro décimas en su tasa, alcanzando el -23 por ciento. Esto obedeció a una menor caída en los precios de la producción de gas y en la distribución por tubería de combustibles gaseosos en comparación con noviembre de 2022.
Por otro lado, se notó una influencia en la moderación de la tasa de inflación industrial debido a la estabilización en los precios de la fabricación de productos lácteos y a una menor subida en la fabricación de aceites y grasas vegetales y animales, en comparación con el año anterior. Los bienes de consumo no duradero vieron reducida su tasa en casi un punto, situándose en el 7,5 por ciento.
En cuanto a la variación mensual, los precios industriales disminuyeron un 2 por ciento de octubre a noviembre, siendo este el descenso más significativo desde marzo pasado, cuando la caída fue del 2,5 por ciento. La categoría de energía figuró como el principal factor detrás de este retroceso mensual, con un descenso del 6,4 por ciento debido al menor coste en el refino de petróleo y en la producción de gas y energía eléctrica.
