La Guardia Civil de la Comandancia de Guadalajara ha llevado a cabo la operación ‘Monopolis’, en la que se ha desarticulado un grupo criminal muy activo dedicado al robo de mercancía en camiones. Este grupo operaba en diversas provincias, incluyendo Madrid, Zaragoza, Burgos, Toledo, Cáceres, Guipúzcoa y Guadalajara. A lo largo de la operación, se han esclarecido un total de 36 delitos y se han recuperado tres cabezas tractoras y tres semirremolques.
La investigación comenzó en febrero, tras un robo con intimidación de una cabeza tractora de un camión en el Polígono Industria Cantos Blancos de Cabanillas del Campo. Durante las indagaciones, se determinó que los sospechosos formaban parte de un grupo criminal organizado y jerarquizado, donde cada miembro tenía un rol específico.
El líder del grupo era responsable de asignar y organizar las tareas, mientras que un equipo de vigilancia se encargaba de supervisar las áreas industriales y seleccionar los objetivos a robar. Un tercer grupo, denominado «equipo de intervención», era el que finalmente cometía los robos. En algunos casos, el grupo sustraía el camión completo, mientras que en otras ocasiones solo se llevaban la cabeza tractora, trasladándose posteriormente hasta el remolque elegido con la apariencia de un profesional del transporte.
El grupo tomó diversas precauciones para evitar ser capturado, como inutilizar dispositivos GPS de los vehículos y desplazarse escoltados por un coche lanzadera que alertaba de posibles controles policiales. Después de cometer los robos, la mercancía era vendida y los camiones abandonados en polígonos industriales.
Los objetos sustraídos variaban desde electrodomésticos hasta prendas de vestir. Uno de los robos más significativos fue el realizado en la localidad de Milagros (Burgos), donde se apoderaron de mercancía textil valorada en 700.000 euros.
Como resultado de esta operación, la Unidad Orgánica de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Guadalajara ha detenido a seis personas e investigado a otras cuatro. De los detenidos, ocho son de nacionalidad española y dos marroquíes, con edades entre los 20 y 50 años. Se les imputan múltiples delitos, incluyendo pertenencia a grupo criminal, robo con fuerza, robo con violencia o intimidación, daños, hurto, falsificación de documento público y robo o hurto de uso de vehículos.