La Hermandad de Nuestra Señora de las Virtudes junto con el Ayuntamiento de Santa Cruz de Mudela, Ciudad Real, han emitido un comunicado oficial donde denuncian la desaparición de un objeto de gran significado para la comunidad: la imagen de Nuestra Señora de las Virtudes, venerada patrona de dicho municipio. La talla, que se encontraba en su santuario, ha sido objeto de lo que parece ser un acto de robo intencionado.
El suceso ha causado gran consternación entre los residentes de Santa Cruz de Mudela, quienes han expresado su inquietud y tristeza en las redes sociales. Los detalles revelados en el comunicado sugieren un hecho premeditado. Según las evidencias, una puerta de acceso al santuario ha sido forzada y el cristal que protegía la hornacina de la venerada imagen fue destrozado.
La conmoción no se detiene allí, ya que la hermandad y el Consistorio han hecho un llamamiento público a los responsables a través del mismo comunicado, instándoles a que devuelvan la imagen, subrayando que aunque su valor material pueda considerarse nulo, representa un tesoro sentimental inestimable para la comunidad.
Las fuerzas de seguridad han sido notificadas del incidente y están realizando las investigaciones pertinentes. Mientras se desarrolla la búsqueda de la sagrada figura, la programación religiosa local ha sufrido cambios. A pesar de la ausencia de la imagen, la eucaristía destinada a los enfermos se celebrará el próximo domingo como estaba previsto; sin embargo, el tradicional pasacalles con la banda de cornetas y tambores se realizará en el atrio de la parroquia en lugar de su ruta habitual.
El lugar donde ocurría el culto a la imagen de Nuestra Señora de las Virtudes es un sitio de gran interés histórico y cultural. El santuario se encuentra a unos 8 kilómetros del núcleo urbano de Santa Cruz de Mudela y forma parte de un conjunto compuesto por una plaza de toros cuadrada, única en su género. Ambas estructuras, la plaza y la ermita, fueron declaradas Monumento Artístico Nacional en 1981.
Con su ermita datando del siglo XVI y adornada con espléndidos frescos del barroco ciudadrealeño –comparables en belleza a los del palacio de Viso del Marqués–, y una plaza de toros que algunos expertos reconocen como la más antigua del mundo aún en pie, el complejo arquitectónico de las Virtudes ostenta una relevancia que trasciende lo local. La ausencia de la imagen de Nuestra Señora de las Virtudes es, sin duda, un duro golpe para la comunidad, que espera su pronta recuperación.
