En un recrudecimiento de la tensión que azota Oriente Medio, la violencia escaló nuevamente este lunes con un bombardeo del Ejército de Israel en la Franja de Gaza, que dejó un saldo de diez palestinos muertos en el campamento de refugiados de Nuseirat, ubicado en el centro del enclave. Este ataque es parte de una serie de hostilidades que han sacudido la región durante más de once meses, desencadenadas por acciones militares iniciadas el 7 de octubre de 2023 por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) junto con otras facciones palestinas.
El bombardeo, dirigido a una residencia cercana al cementerio de Al Qasam, no solo resultó en la pérdida de vidas sino que también dejó tras de sí a 15 heridos. La información, proporcionada por el diario local ‘Filastin’, afiliado a Hamás, concuerda con reportes de agencias de noticias palestinas que ajustan la cifra de fallecidos a diez. Además, un segundo ataque aéreo cobró la vida de al menos cuatro personas más en el barrio de Sheij Raduán, en la ciudad de Gaza, aunque el Ejército israelí aún no ha emitido comentarios respecto a este incidente.
Este último episodio de violencia se enmarca dentro de una campaña militar de Israel que responde a los ataques de octubre pasado, que provocaron aproximadamente 1,200 muertes y cerca de 250 secuestros. Desde el comienzo de esta ofensiva, las autoridades de Gaza han contabilizado más de 41,200 palestinos muertos, a los cuales se suman más de 690 en Cisjordania y Jerusalén Este debido a enfrentamientos con fuerzas de seguridad y ataques perpetrados por colonos israelíes.
En contraparte, el ejército de Israel ha reportado que varios de sus militares resultaron «levemente heridos» en un ataque contra la zona norte de los ocupados Altos del Golán, efectuado desde el sur de Líbano en un contexto marcado por confrontaciones con el grupo chií Hezbolá. Los militares heridos recibieron tratamiento en el lugar por equipos médicos, sin requerir evacuación, conforme a un comunicado oficial de las Fuerzas de Defensa de Israel.
Mientras tanto, la Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han llevado a cabo operaciones de bombardeo contra alrededor de 20 plataformas de lanzamiento de cohetes y sitios militares de Hezbolá en el sur de Líbano. Estas acciones siguen a la detección de dos proyectiles cruzando hacia los Altos del Golán, lo que previamente había activado las alarmas antiaéreas en la región.
Este conflicto, que se extiende por casi un año, sigue alimentando un ciclo de violencia y represalias que impacta profundamente en la vida de civiles inocentes, exponiendo la complejidad y volatilidad del prolongado conflicto en Oriente Medio.