La Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), a través de su facultad de Ciencias Ambientales en Toledo, se convierte en el anfitrión de la cuarta reunión anual de la Conferencia Española de Decanas y Decanos de Ciencias Ambientales. Esta reunión da seguimiento a ediciones previas en Granada, Barcelona y Madrid desde la creación de la conferencia en 2022.
El decano de la facultad toledana, Enrique Sánchez, comunicó a Diario CLM que la actual edición del evento es una oportunidad vital para conjugar visiones en relación con un ámbito académico que apenas cuenta con un cuarto de siglo de existencia. Sánchez enfatiza la naturaleza transversal y actual de la disciplina que estudia temáticas medioambientales imprescindibles, a pesar de contar con menos de «treinta años».
La principal motivación de la conferencia yace en la preocupación por la decreciente demanda de estudios en Ciencias Ambientales, a pesar del rol crucial que tienen los expertos y graduados en la materia. Durante la reunión se intentará dar más visibilidad a este campo de estudio, abordando una serie de «problemáticas ambientales» como contaminación, desertificación, cambio climático y la presión sobre la biodiversidad, así como las energías renovables y la sostenibilidad ambiental.
El decano Sánchez argumenta que los ambientólogos juegan un papel diverso del de los ecologistas, quienes abogan y sensibilizan sobre la materia, mientras los ambientólogos contribuyen su conocimiento y experiencia a todos los niveles de la sociedad. En respuesta a un medioambiente donde las prerrogativas de conservación parecen más asumidas por las nuevas generaciones, Sánchez recalca que incluso la concienciación implícita requiere ser fortalecida para motivar a los estudiantes preuniversitarios a enrolarse en estudios superiores ambientales.
Una estrategia de impulso a los estudios ambientales contempla una mayor presencia en los institutos, donde la oferta de asignaturas relacionadas con Ciencias Ambientales ha decrecido. Sánchez resalta la necesidad perentoria de formar ambientólogos, específicamente para atender los desafíos actuales y futuros de la sociedad.
Respecto a la desafiante temática del cambio climático, que Sánchez describe como «el mayor reto de los próximos cien años», el decano manifiesta que la ciencia ofrece una perspectiva firme y un ánimo de contienda frente a los negacionistas, calificando tales posiciones como «aberraciones absolutas». Opina que la formación y la educación provideda por ambientólogos son fundamentales para confrontar cualquier narrativa escéptica.
Celebrando sus 25 años, la facultad ha formado a más de mil alumnos y Sánchez asegura que «hacen falta muchísimos más» profesionales en el campo. El avance en términos de legislación ambiental y la emergencia de nuevos conceptos como la economía circular van de la mano con el compromiso de la facultad de mantenerse abierta y difundir sus conocimientos en beneficio de la sociedad.
