Críticas del PSOE a la Posición del PP en Defensa de los Agricultores de Castilla-La Mancha
En un acalorado debate en las Cortes de Castilla-La Mancha, el portavoz de Agricultura del grupo socialista, Antonio Sánchez Requena, ha manifestado su descontento con la postura del Partido Popular (PP) respecto a la defensa de los intereses de los agricultores de la región. Sánchez Requena ha señalado las contradicciones del PP, atribuyéndolas a un intento por no disgustar a su socio de gobierno, Vox.
El debate se centró en las políticas arancelarias implementadas por la administración Trump, las cuales podrían tener serias repercusiones económicas para Castilla-La Mancha. Ante la amenaza de que se establezcan aranceles del 200% al vino y otros productos europeos, así como un posible impacto de 140 millones de euros sobre los productos agroalimentarios de la región, Sánchez Requena cuestionó al PP por su falta de consenso en la defensa de los productores locales.
El portavoz socialista insistió en que la posición del PP parece hipotecada a sus acuerdos con Vox, lo que ha llevado a evitar un rechazo contundente a las medidas arancelarias de Trump. Según Sánchez Requena, esto contradice los intereses económicos de Castilla-La Mancha.
Además, destacó la importancia de apoyar la propuesta de resolución del grupo socialista, argumentando que es necesario para mantener la credibilidad del PP y evitar mezclar o enredar en los debates. Recordó que la cuestión de aranceles es de vital importancia para el sector agroalimentario de la región, que ha visto un incremento del 75% en sus exportaciones desde 2015.
Otra crítica lanzada por Sánchez Requena fue la disposición del PP a perder 500 millones de euros en fondos de la Política Agraria Común (PAC) en su intento por no enfadar a Vox y resistir la legislación europea. Resaltó la dificultad de compaginar el patriotismo con una alianza que claramente perjudica los intereses económicos y nacionales de España.
Concluyendo su intervención, Sánchez Requena hizo un llamado a Vox para que se una al rechazo de las políticas arancelarias que, en su opinión, son perjudiciales para la economía de Castilla-La Mancha y de España. Tildó la actitud de Vox como "absolutamente incomprensible", instando a ambos partidos a priorizar el bienestar económico de la región.