En un mundo cada vez más preocupado por la sostenibilidad, ha surgido una tendencia creativa que combina reciclaje y arte: la transformación de los rollos de papel higiénico en elegantes y únicos marcadores de libros. Esta propuesta no solo evita el desperdicio, sino que impulsa una alternativa casera frente a los productos comerciales de tiendas como Zara Home, ofreciendo una solución personalizada al alcance de todos.
El proceso artesanal comienza cortando el cartón en tiras finas que, una vez aplanadas, sirven como lienzo para la creatividad. Algunos aficionados prefieren aplicar acuarelas para lograr efectos de color delicados, mientras que otros optan por la técnica del decoupage, utilizando recortes de revistas y papeles decorativos para crear texturas complejas y llamativas. La versatilidad del método permite desde diseños florales hasta patrones geométricos, dando vida a infinitas posibilidades estéticas.
Más allá de sus beneficios ecológicos, esta actividad promueve el bienestar mental. Quienes se sumergen en la confección de estos marcadores descubren un espacio de meditación y relax, lo que ha fomentado una comunidad activa en redes sociales. En estas plataformas, los usuarios comparten sus creaciones, inspirando a otros a explorar su propia creatividad y valorando la artesanía en lo cotidiano.
Los marcadores de rollos no solo cumplen una función práctica, sino que narran una historia personal. Cada pieza refleja la personalidad del creador, convirtiéndose en un regalo significativo y personalizado para cualquier amante de la literatura. La tendencia, que comenzó como una solución de reciclaje, ha desencadenado un movimiento de expresión individual que demuestra cómo algo tan simple puede transformarse en un accesorio indispensable para los lectores ávidos.