La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha manifestado su condena frente a las amenazas sufridas por una médica y una enfermera del centro de salud de Bolaños de Calatrava el día de ayer, por parte de un familiar del paciente atendido.
De acuerdo con el comunicado emitido por CSIF, los acontecimientos ocurrieron cuando las profesionales de la salud se desplazaron al domicilio del paciente. Una vez allí, un familiar de esta persona las amenazó, lo que las obligó a solicitar la intervención policial.
El sindicato ha expresado su lamento por la continuación de sucesos de esta índole y ha vuelto a hacer un llamado para que se proporcione al menos un vigilante de seguridad en cada centro, con el fin de prevenir agresiones y amenazas hacia los profesionales de la salud tanto en los centros como en la atención domiciliaria.
«Es necesario poner fin a esta inseguridad. Nuestros profesionales tienen miedo y se sienten desamparados», destacó Ana Isabel Fernández, responsable provincial de CSIF Sanidad.
Esta ya es la segunda agresión que médicos y enfermeras del centro de salud de Bolaños de Calatrava han sufrido en lo que va del año, según advierte el sindicato.
CSIF ya denunció en el pasado mes de abril unos hechos similares a los ocurridos en la jornada de ayer. En aquella ocasión, una médica recibió insultos y amenazas por parte de un paciente, que incluso protagonizó una confrontación violenta hasta que la Guardia Civil se presentó en el centro.
