La Escuela de Administración Regional ha sido el escenario donde este miércoles se ha rubricado la conformación del nuevo Consejo de Economía Social de Castilla-La Mancha, que se reedita esta legislatura «para dar voz y palabra al consenso y al diálogo social», según ha indicado en declaraciones a los medios la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco.
Servirá como «un nuevo espacio de debate» para poner en común las medidas que la región ha de generar para hacer del sector de la economía social un sector de oportunidad en todas las ciudades y muy especialmente también en zonas más rurales».
«Se enmarca también dentro de la Estrategia Nacional de Economía Social que aprobó también el Gobierno de España en mayo de este mismo año y dentro de poco también verá a la luz la Estrategia Europea de Economía Social donde estamos perfectamente alineados», ha apuntado.
Tendrán representación «más de 1.900 entidades», en su mayoría cooperativas, que generan casi 20.000 puestos de trabajo, según ha apuntado la consejera.
Igualmente, tienen cabida el centenar de centros especiales de empleo de la región que operan con personas con alguna discapacidad, así como las empresas de inserción laboral desplegadas por todo el territorio.
«Hoy todo el sector está representado en ese Consejo Regional de Economía Social, en la articulación lógica que tiene también la estructura del diálogo social con la patronal y los sindicatos en el Gobierno regional», ha defendido Franco.
La conformación de este órgano es el paso previo a desarrollar la estrategia a poner en marcha durante esta legislatura, con vocación de poner el acento en los más jóvenes y, sobre todo, «en las zonas rurales».