Corea del Norte Inicia el Año con el Lanzamiento de un Avanzado Misil Balístico Hipersónico

Corea del Norte ha retomado sus actividades de lanzamiento de misiles con la proyección de su primer misil balístico del año, marcando el primer evento de esta naturaleza en aproximadamente dos meses. Esta acción ha sido confirmada tanto por autoridades de Corea del Sur como por Japón, denunciando el acto en un contexto en el que las tensiones en la península coreana no han hecho más que intensificarse a lo largo de los últimos meses.

De acuerdo con datos proporcionados por el Estado Mayor Conjunto (JCS) surcoreano, el proyectil lanzado sería un misil balístico de alcance intermedio (IRBM), cuyo lanzamiento habría ocurrido poco después de la medianoche, hora local. El origen del misil se situaría en algún punto cercano a la capital norcoreana, Pyongyang, y habría seguido una trayectoria de aproximadamente 1.100 kilómetros antes de sumergirse en las aguas del mar.

Especulaciones dentro del ejército de Corea del Sur sugieren que el artefacto en cuestión podría tratarse de un misil hipersónico, categoría dentro de la cual se encuentran otros proyectiles previamente lanzados por Pyongyang en enero y abril del año 2024. Este tipo de misiles son notoriamente difíciles de interceptar debido a su alta velocidad y capacidad de maniobra, lo que añade un componente extra de preocupación a este evento.

Por otro lado, el Ministerio de Defensa japonés ha realizado estimaciones propias, señalando que el misil habría caído alrededor de las 12:12 (hora local), aunque fuera de la Zona Económica Exclusiva (ZEE) de Japón, mitigando así la amenaza inmediata de un impacto directo en su territorio. No obstante, el gobierno japonés ha tomado medidas precautorias, convocando un equipo de emergencia dedicado a la recopilación de información detallada y la confirmación de la ausencia de daños.

Este incidente ocurre en un contexto político particularmente delicado, tan solo dos semanas antes de que el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, asuma oficialmente el cargo en una ceremonia pautada para el 20 de enero. Curiosamente, el lanzamiento anterior de Pyongyang coincidió con la fecha de las elecciones presidenciales estadounidenses, el 5 de noviembre, lo que podría interpretarse como una manifestación de desafío o una demostración de fuerza en momentos de relevancia política para Estados Unidos.

La situación en la península coreana continúa siendo crítica, con las relaciones entre las dos Coreas posiblemente en su punto más bajo en años. Esto se debe en gran medida a la persistencia de Corea del Norte en realizar ensayos balísticos, desafiando abiertamente las sanciones impuestas por Naciones Unidas. Asimismo, el estrechamiento de la cooperación militar entre Estados Unidos y Corea del Sur ha contribuido a elevar las tensiones, en un ciclo aparentemente sin fin de provocaciones y respuestas militares.

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