El Consejo Rector de Cooperativas Agro-alimentarias Castilla-La Mancha ha analizado las nuevas dotaciones fijadas por la Confederación para las diferentes masas del Alto Guadiana para el año 2024, las cuales han sufrido una reducción generalizada de entre un 5 y un 15%. Esta reducción es considerada «claramente insuficiente» por la Cooperativa, la cual afirma que no se está garantizando el desarrollo de una actividad agraria rentable y sostenible, siendo esta la «principal forma de vida en el medio rural de la región».
En una nota de prensa emitida por la Cooperativa, también se ha destacado la ausencia de compensación para los titulares de derechos de agua para riego, quienes enfrentan una reducción de sus concesiones sin indemnización alguna. A pesar de comprender la situación actual de escasez de precipitaciones, desde la Cooperativa se insiste en la necesidad de una planificación a largo plazo para asegurar la continuidad de la actividad agroalimentaria en la región, que es un pilar clave de la economía regional y, particularmente, vital en el Alto Guadiana.
Entre las medidas históricamente solicitadas, se encuentra la realización de un estudio detallado sobre las características y existencias reales de las aguas subterráneas que, según la nota de prensa, no han sido objeto de valoración profunda en décadas. Se critica la falta de un enfoque que armonice con la realidad económica y social de la zona, donde la política de restricciones ha demostrado ser ineficaz y no proporciona alternativas que aseguren que la actividad agroalimentaria no se vea afectada.
La Cooperativa hace un llamamiento a la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural para que se implique en el apoyo a la agricultura de regadío, la cual permitiría llevar a cabo una producción sostenible desde los puntos de vista económico, social y medioambiental. Este apoyo es considerado esencial para combatir el despoblamiento que la región sufre desde hace años.
Asimismo, se ha informado sobre la revisión del recurso contencioso-administrativo presentado ante el Tribunal Supremo en contra de los Planes Hidrológicos de diferentes cuencas, incluida la del Guadiana. Los planes vigentes no se consideran acordes con la realidad productiva de la región y omiten el uso de recursos disponibles no contemplados en ellos.
El Consejo Rector mantiene la esperanza de que en 2024 sus reivindicaciones sean oídas y se instaure un clima de diálogo entre las confederaciones hidrográficas y el sector agroalimentario que permita generar las condiciones necesarias para mantener la producción sostenible de alimentos.