El alcalde de Escalona, Álvaro Gutiérrez, ha expresado su «absoluta sorpresa y consternación» tras el trágico suceso ocurrido en la localidad, donde un hombre de 65 años disparó y mató a su hijo de 37 años con una escopeta durante una disputa familiar. El incidente tuvo lugar en un domicilio de la calle Margarita. Gutiérrez ha manifestado que esta familia es conocida en el pueblo y ha vivido en Escalona durante «muchos años», lo que ha incrementado la incredulidad sobre lo sucedido.
El alcalde destacó que «de ninguna manera podríamos pensar» que un acto de tal gravedad pudiera ocurrir en su comunidad, señalando que no había indicios que hicieran presagiar un desenlace así. «Son gente normal», recalcó Gutiérrez, quien expresó que ni la Policía Local, ni la Guardia Civil, ni el Ayuntamiento habían tenido motivos para suponer que podría ocurrir un crimen de tales características. «Nadie podría haber adivinado que este hombre iba a hacer lo que ha hecho», enfatizó.
El incidente se produjo tras un aviso recibido por la Guardia Civil alrededor de las 23:25 horas del jueves, alertando sobre un herido por arma de fuego. A la escena acudieron una UVI y un médico de urgencias, pero, lamentablemente, su llegada fue tardía y no pudieron hacer nada por salvar la vida del joven. También estuvieron presentes agentes de la Policía Local.
Tras lo sucedido, la madre de la víctima fue atendida por un equipo psicosocial de Cruz Roja debido a una crisis de ansiedad. Fuentes de la Delegación del Gobierno han confirmado que varias patrullas de la Guardia Civil se desplazaron al lugar tras recibir el aviso, y el levantamiento del cadáver se llevó a cabo a las 5:30 horas del viernes. La Unidad de la Policía Judicial de Toledo ha asumido la investigación del caso, y se ha informado que el padre, quien fue detenido, contaba con permiso de armas.
