El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural del Gobierno de Castilla-La Mancha, Julián Martínez Lizán, ha anunciado su intención de solicitar a los responsables de Agricultura de otras comunidades autónomas que se reúnan en los Consejos Consultivos de Política Agrícola y Política Pesquera para Asuntos Comunitarios, que se llevan a cabo en el Ministerio de Agricultura, con el objetivo de unir esfuerzos en defensa del sector agropecuario.
Martínez Lizán ha enfatizado que, independientemente de las inclinaciones políticas, todos los consejeros comparten «los mismos intereses en la defensa del sector agropecuario». Ha señalado la necesidad de dejar de lado las diferencias políticas y concentrar esfuerzos en la protección de los intereses de los agricultores y ganaderos, resaltando que el futuro del campo es una preocupación común.
El consejero ha subrayado la urgencia de que las comunidades autónomas muestren un apoyo sólido al Ministerio, proponiendo la participación de los ministros de Agricultura de los diversos países europeos en los debates relacionados con la economía y la gobernanza de la Política Agraria Común. Esta participación es crucial para que las decisiones no dependerán únicamente del comisario de Agricultura, lo que podría poner en riesgo los intereses de los agricultores españoles.
En declaraciones a Europa Press, Martínez Lizán ha instado a todos los actores políticos a demostrar unidad en la defensa del campo y ha indicado que la propuesta desde Castilla-La Mancha se centra en «hacer presión» para asegurar que los ministerios agrícolas de los países miembros de la Unión Europea tengan voz en las decisiones críticas, especialmente en la asignación de presupuestos que garanticen la continuidad y las líneas de acción de la política agrícola.
Además, ha manifestado la importancia de poder negociar los aspectos normativos que reglamentan el desarrollo de la actividad agrícola, con el fin de asegurar la viabilidad y supervivencia de las comunidades rurales.