En Ciudad Real, CCOO ha rendido homenaje a las nueve víctimas del accidente en la planta de Repsol, ocurrido el 14 de agosto de 2003. Este trágico incidente sigue presente en la memoria colectiva de la comunidad, aun cuando ya han pasado 22 años. La explosión, que sacudió no solo a las familias de los fallecidos sino a toda una región, es recordada como un llamado constante a mejorar las prácticas de seguridad laboral.
El homenaje realizado por CCOO busca no solo recordar a los afectados, sino también subrayar la importancia de crear una cultura preventiva en el ámbito laboral. La siniestralidad en el trabajo sigue siendo un desafío importante en España, con cifras que reflejan la necesidad urgente de adoptar medidas eficaces para proteger a los trabajadores.
Las conmemoraciones de este tipo renuevan el compromiso de sindicatos y otras entidades con la seguridad en el trabajo, destacando que todavía queda mucho por hacer. Los actos simbólicos de memoria, como el llevado a cabo por CCOO, son una oportunidad para exigir un cambio en las políticas empresariales que promuevan un ambiente laboral más seguro.
Esta ceremonia, que se celebra anualmente, ofrece un espacio para la reflexión sobre las lecciones aprendidas de aquel evento trágico, reafirmando la necesidad de seguir luchando por condiciones de trabajo que prioricen la vida y la integridad de las personas.
Fuente: CCOO Castilla-La Mancha
