La gran final de Gran Hermano quedó marcada por un incidente inesperado y desafortunado que involucró a las familias de los dos finalistas, justo antes del anuncio del ganador. El plató fue escenario de un tenso enfrentamiento entre la madre de Juan y la hermana de Óscar, en los momentos finales de la votación del público.
El nerviosismo era palpable ante la igualdad de votos a solo diez minutos del cierre de la aplicación de votación. La discusión se encendió cuando Isa Landa, hermana de Óscar, se encontraba criticando una actitud hacia su hermano. Inesperadamente, fue interrumpida de manera abrupta por la madre de Juan, generando una ola de indignación.
"¡Tú te callas, que eres una impresentable!", exclamó la madre de Juan, lo que llevó a Isa a reaccionar acercándose y enfrentándose a ella. El enfrentamiento ocurrió en vivo, justo cuando Jorge Javier Vázquez, el presentador del programa, estaba a punto de cortar a un anuncio publicitario. El incidente sorprendió tanto a los presentes en el estudio como a los espectadores en casa.
Tensiones previamente subyacentes entre las dos familias salieron a la luz en ese momento, con Isa Landa criticando las acciones y educación mostradas por la contraparte, evidenciando un profundo descontento con el comportamiento exhibido durante la disputa.
Incluso mientras las cámaras capturaban este momento tenso, la controversia se extendió entre los espectadores y seguidores del programa, generando una avalancha de comentarios y discusiones en las redes sociales.
La gala tuvo que ser interrumpida momentáneamente, utilizando la pausa publicitaria para tratar de volver a la calma. Este incidente no solo dejó una marca en la final de esta edición de Gran Hermano, sino que también sorprendió a los finalistas, Óscar y Juan, quienes desde el centro del plató observaban la escena, apelando a las partes a mantener la compostura.
A pesar de los esfuerzos por volver a la normalidad, el incidente entre las familias ha sido uno de los momentos más comentados de la noche, eclipsando parcialmente el resultado final del concurso. Al final de la noche, contra todo pronóstico y sumido en la polémica, Juan fue proclamado ganador de esta edición de Gran Hermano, una victoria seguramente agridulce dadas las circunstancias que rodearon su conclusión.