La Dirección General de Salud Pública de Castilla-La Mancha ha anunciado la confirmación del primer caso de fiebre hemorrágica de Crimea-Congo en la Comunidad Autónoma, habiendo sido diagnosticado en la Comunidad de Madrid. El área sanitaria que ha notificado el caso pertenece a Talavera de la Reina, ubicada en la provincia de Toledo.
Según Laura Ruiz, directora general de Salud Pública, la fiebre hemorrágica Crimea-Congo es una patología infecciosa viral, predominantemente transmitida por la picadura de garrapatas, en particular por la garrapata de la especie Hyalommm, originaria de África. La información fue divulgada a través de un comunicado de prensa remitido por la Junta.
La enfermedad se caracteriza por síntomas que se desarrollan en dos etapas. Inicialmente, la persona afectada puede experimentar fiebre alta repentina, dolor de cabeza y de músculos. Posteriormente, se puede producir una fase de carácter más grave: la hemorrágica, que conlleva un riesgo aumentado de contagio.
Ante esta situación, la Dirección General de Salud Pública ha decidido emitir varias recomendaciones para la población. Se aconseja, en la medida de lo posible, evitar transitar fuera de los senderos cuando se está en el campo, ya que las garrapatas habitan en la hierba y pueden adherirse a las personas con el simple contacto. También se enfatiza la importancia de revisar la ropa y el cuerpo, especialmente el cuero cabelludo, después de realizar excursiones al aire libre, para asegurarse de que no haya garrapatas adheridas. Además, sugiere que podría ser beneficioso el uso de repelentes específicos contra garrapatas en dichas salidas.
Tras la detección del caso madrileño, las autoridades sanitarias han intensificado la vigilancia y alerta con el fin de identificar de manera precoz nuevos posibles casos y así poder adoptar nuevas medidas de contención.
Finalmente, las autoridades sanitarias han tomado medidas de desinsectación en las zonas de alto riesgo en el área afectada del municipio donde ocurrió la picadura, para reducir la probabilidad de que se presenten nuevos incidentes relacionados con el patógeno.