Desde el Gobierno de Castilla-La Mancha se ha manifestado la expectativa de que la construcción del nuevo cuartel de la Guardia Civil en Toledo continúe su curso, a pesar de la incertidumbre expresada por el delegado del Gobierno, Francisco Tierraseca. La portavoz del Gobierno regional, Esther Padilla, ha enfatizado en una rueda de prensa reciente que el gobierno regional ha desempeñado una posición de mediación, centrándose en escuchar a las dos entidades clave en la promoción de este proyecto: el Ayuntamiento de Toledo y la propia Guardia Civil.
Padilla ha aclarado que el papel de la Junta no ha sido el de forjar un acuerdo tripartito, sino más bien de facilitar la coordinación y el diálogo entre ambas partes. El objetivo fundamental ha sido el de encontrar un terreno alternativo que satisfaga los requerimientos necesarios para la nueva ubicación del cuartel dentro de la ciudad.
La portavoz ha recalcado la importancia de que el Ayuntamiento y la Guardia Civil lleguen a un consenso, subrayando que es preferible la construcción de un cuartel adecuado y bien situado, aun si ello implica retrasos, a no contar con tal instalación debido a desacuerdos sobre el lugar o el proyecto.
El Gobierno de Castilla-La Mancha ha mostrado así su disposición a apoyar y colaborar en la búsqueda de soluciones, y ya han propuesto una parcela en otra zona de la ciudad para facilitar que el desarrollo del nuevo cuartel de la Guardia Civil en Toledo llegue a buen término. La intervención del Gobierno regional busca ser determinante para el avance de este proyecto de seguridad tan necesario para la capital toledana.