En un giro inesperado durante la votación para la aprobación de los presupuestos del Ayuntamiento de Albacete para el año 2024, los concejales del Grupo Municipal Vox, José Ramón Conesa, Sandra Martínez y José Bernabé, se desmarcaron de la línea de su partido, optando por la abstención en lugar del rechazo exigido por la formación política.
Según explicaron en una nota de prensa, su decisión estuvo motivada exclusivamente por «el interés supremo de la ciudad y sus habitantes», enfrentándose al potencial colapso económico que hubiera resultado de continuar operando bajo presupuestos prorrogados. Esta situación habría imposibilitado al Consistorio cumplir con todas sus obligaciones y proceder con la ejecución de diversas obras públicas pendientes.
Los ediles enfatizaron que la decisión de abstenerse no fue tomada a la ligera, sino tras una «profunda reflexión» sobre cómo cada opción de voto afectaría al futuro de Albacete. Su acción se presenta como una muestra de compromiso con el bienestar de la ciudad y sus residentes, destacando la prioridad de los intereses ciudadanos sobre cualquier otra consideración política.
La nota de prensa concluyó con la reafirmación de los tres concejales de su intención de seguir trabajando de forma «responsable y constructiva» en el Ayuntamiento, y de continuar velando por una gestión municipal que privilegie los intereses de Albacete y su población. La responsabilidad de ejercer un cargo público ha llevado, en este caso, a una decisión que subraya la importancia de la conciencia individual de los representantes políticos a la hora de hacer frente a circunstancias decisivas para la comunidad que representan.