El Partido Socialista liderado por Emiliano García-Page mantendría la mayoría absoluta en la región de Castilla-La Mancha, con el 91,69% de los votos contados. El PSOE obtendría un total de 17 escaños, por una diferencia de apenas 600 votos en la circunscripción de Ciudad Real. El Partido Popular mejoraría su resultado anterior con 12 diputados, mientras que Vox conseguiría cuatro actas en el Parlamento, una suma de fuerzas insuficiente para desplazar a los socialistas del Gobierno castellanomanchego.
En cuanto a la provincia de Albacete, donde se eligen siete escaños, el PSOE obtendría tres diputados, el PP otros tres y Vox uno. En Cuenca, que pone en juego cinco escaños, el PSOE lograría tres escaños y el PP dos. En Guadalajara, también con cinco escaños en juego, el PSOE obtendría dos diputados, el PP otros dos y Vox uno. Por último, en la provincia de Toledo, donde se eligen nueve escaños, el PSOE lograría cinco diputados, el PP tres y Vox uno.
En cuanto a la participación ciudadana, en los comicios de 2023 votaron 1.009.594 personas, lo que supone una abstención del 29,13%. En las elecciones anteriores de 2019, hubo una participación del 30,55%, con 1.091.900 votos registrados.
En definitiva, los resultados electorales en Castilla-La Mancha apuntan a la continuidad del liderazgo socialista en la región, con una ventaja suficiente sobre las otras fuerzas políticas.