En un ambiente cargado de expectativas políticas y económicas, el presidente Trump respondió a preguntas de la prensa mientras se encontraba a bordo de Air Force One, en ruta hacia la Base Conjunta Andrews. Durante la rueda de prensa, que se llevó a cabo el 9 de marzo de 2025, el mandatario abordó diversos temas de actualidad que están generando un intenso debate en el país y a nivel internacional.
Al ser cuestionado sobre las sanciones a Rusia, Trump indicó que se están llevando a cabo «grandes reuniones» en Arabia Saudita que incluirán discusiones sobre el conflicto en Ucrania. «Muchas personas han muerto esta semana, tanto ucranianos como rusos. Creo que todos quieren ver que se haga algo al respecto», comentó, sugiriendo que está abierto a discutir soluciones pacíficas.
Sin embargo, no evadió las preguntas difíciles. Ante la afirmación de un periodista de que el presidente ruso, Vladimir Putin, podría estar «faltándole al respeto» al atacar Ucrania, Trump replicó despectivamente que el reportero había «perdido mucha credibilidad». Esta interacción marcó un tono de confrontación entre el presidente y varios medios de comunicación durante la conferencia.
Las repercusiones de las políticas tarifarias también ocupan un lugar central en su agenda. Trump aseguró que «las tarifas serán lo mejor que hemos hecho como país», prometiendo una revitalización de las fábricas y la creación de empleos, aduciendo que miles de compañías automotrices ya están anunciando planes para abrir fábricas en Estados Unidos. «Desde la llegada del NAFTA hemos perdido 90,000 fábricas. Pero esto está cambiando», insistió.
El presidente también abordó la preocupación de los estadounidenses sobre la caída de sus cuentas de jubilación en medio de estas conversaciones sobre aranceles. «Creo que estos aranceles traerán riqueza al país de manera significativa», dijo, proyectando optimismo sobre la economía.
Con un escenario político polarizado, la posibilidad de un cierre del gobierno también fue discutida. Trump no descartó esta posibilidad, pero se mostró confiado en que se aprobaría una resolución continua (CR), refiriéndose a los demócratas como violadores del orden público que desean «destruir el país».
Al ser preguntado sobre las tensiones entre su gabinete y figuras prominentes como Elon Musk, el presidente se mostró conciliador, aunque notó que ha habido litigios relacionados con contratos gubernamentales. «Los problemas no son tan altos como se reporta», aseguró Trump, destacando que las relaciones son, en gran medida, «buenas».
En un giro drástico, Trump también se refirió a recientes ejercicios militares conjuntos de Rusia, China e Irán, minimizando cualquier preocupación al respecto. «No, no me preocupa en absoluto. Porque somos más fuertes que todos ellos. Hemos reconstruido el ejército», afirmó con confianza.
En cuanto a la situación no resuelta en Ucrania, el presidente dejó claro que cualquier progreso dependería de la disposición de las partes a buscar un acuerdo. «Es una guerra sin sentido, y tenemos que detenerla. Miles de vidas se están perdiendo cada semana», dijo, enfatizando que quiere poner fin a lo que calificó de «campo de exterminio».
Por último, a medida que la conferencia se acercaba a su fin y el avión se preparaba para aterrizar, Trump no mostró preocupación por una posible recesión, manteniendo su postura optimista en medio de la incertidumbre económica. «Vamos a ser tan ricos que no sabrán dónde gastar todo ese dinero», concluyó.
Fuente: WhiteHouse.gov
