El Gobierno de Castilla-La Mancha impulsará la construcción de un Centro de Atención Integral a Víctimas de Violencia Sexual en cada provincia de la región, como parte de su estrategia para prestar una atención asistencial integral y profesional a las mujeres afectadas. La consejera de Igualdad y portavoz, Blanca Fernández, aseguró que el objetivo de los centros es evitar que las agresiones sexuales queden impunes y que las víctimas no denuncien por temor al proceso o al agresor. Además, los centros contarán con una coordinación efectiva con recursos ya existentes, como los centros de la mujer o los recursos de acogida. A través de los centros, se prestará atención jurídica, psicológica y social, con el objetivo de cubrir la mayor parte de las necesidades de las víctimas.
Los centros estarán preparados para que las profesionales se puedan desplazar y estarán coordinados con las Delegaciones Provinciales de Igualdad, los centros de la mujer y también con el Centro de Urgencias y Acogida. Además, la construcción de los centros, que estarán listos en 2024, está financiada con cargo a los Fondos de Recuperación, Transformación y Resiliencia y los fondos del Pacto de Estado contra la Violencia de Género, con un presupuesto global de 6,5 millones de euros.
En cuanto al Centro de Atención a Víctimas de Agresiones Sexuales de Toledo, Blanca Fernández informó que se ubicará en la calle Duque de Lerma 3, antigua sede de la Delegación de Agricultura. La obra ya se ha adjudicado por 416.000 euros y comenzará en breve. La previsión es que en un plazo de tres meses desde el inicio de la obra esté terminado con el objetivo de que para finales de 2023 o principios de 2024, «los centros de atención integral a las víctimas de violencia sexual serán una realidad».
La consejera de Igualdad también mostró su preocupación por el aumento de las conductas de violencia sexual por parte de menores y afirmó que el Gobierno regional presentará una campaña pedagógica que se pondrá en marcha en Castilla-La Mancha Media en los próximos días. La campaña se centra en la educación sexual de niños y niñas y adolescentes y pretende llamar la atención sobre la importancia de la misma en las familias y en la sociedad.
