El reconocido herpetólogo y presentador de televisión, Frank Cuesta, ha sido detenido en Tailandia bajo la acusación de posesión ilegal de animales salvajes protegidos. La detención tuvo lugar en su santuario ubicado en la provincia de Kanchanaburi, tras un operativo policial motivado por una denuncia anónima recibida por las autoridades. Cuesta, que ha dedicado gran parte de su vida a la protección de la fauna, se encuentra actualmente en una comisaría de Lao Khwan, enfrentándose a una situación que podría tener graves consecuencias legales.
La Policía tailandesa actuó después de ser alertada sobre el presunto cuidado de especies protegidas sin los permisos necesarios, lo que ha llevado a la detención del naturalista español. Durante el operativo se incautaron nueve nutrias de uñas pequeñas y una pitón pico de pato, evidenciando la gravedad de las acusaciones. La noticia ha conmocionado tanto a seguidores como a defensores del medio ambiente, quienes conocen el compromiso de Cuesta con la conservación de especies en peligro.
Amigos cercanos al detenido, entre ellos Javier Oliveira, han manifestado su sorpresa y descontento frente a la situación, argumentando que el santuario de Cuesta es un lugar ampliamente reconocido y visitado, que ha sido escenario de numerosas colaboraciones y proyectos con el objetivo de difundir la importancia de la protección animal. Oliveira, en particular, compartió su incredulidad y consternación en el programa ‘Horizonte’ de Iker Jiménez, destacando la transparencia y la visibilidad del trabajo de Cuesta.
Además, Oliveira reveló que se enteró de la detención mientras transmitía en vivo en su canal de YouTube, a través de un mensaje de Cuesta informando sobre la redada. Esta detención ha expuesto la precaria situación en la que Cuesta ha tenido que pasar sus primeros días bajo custodia, durmiendo en el suelo y subsistiendo gracias a la comida que le ha proporcionado su hijo.
La situación legal de Frank Cuesta en Tailandia es complicada. Ha sido vocal sobre las amenazas y los desafíos que enfrenta debido a su activismo contra el tráfico de animales ilegales. Recientemente, había expresado su preocupación sobre posibles problemas legales que podrían afectarlo a él y su santuario, anticipando incluso la posibilidad de acabar en prisión o ser expulsado del país. Ahora, con tres procedimientos judiciales pendientes para la próxima semana, la comunidad internacional y los seguidores de Cuesta esperan con ansiedad noticias sobre su situación y el futuro de su trabajo en la conservación de la vida silvestre.