Desde el entorno del club granota ya saben lo que puede pasar con uno de sus jugadores baluarte en caso que no puedan mantener la categoría
Carlos Álvarez se ha consolidado como uno de los futbolistas más destacados del Levante UD y sus deseos de brillar en esta temporada son evidentes. Sin embargo, su talento ha llamado la atención de varios equipos, lo que ha generado una gran expectativa en el entorno del club. La situación se complica debido a una cláusula descendente en su contrato, que podría permitir su salida a un precio inferior en caso de que el equipo no logre mantener la categoría.
Actualmente, la cláusula de rescisión de Carlos se sitúa en 35 millones de euros, digno de su proyección y habilidades en el campo. Sin embargo, si el Levante descendiera a Segunda División, el coste para los clubes interesados se reduciría a 20 millones. La reciente victoria por goleada frente al Girona FC ha traído optimismo, pero el equipo debe seguir peleando para evitar caer en la segunda división y perder a su estrella.
Carlos Álvarez se puede ir por una cantidad inferior a su cláusula en el Levante UD si hay descenso
La permanencia del Levante UD en la élite del fútbol español se ha vuelto una prioridad, especialmente en el contexto incierto en el que se encuentran. Aunque la reciente victoria les anima, la temporada promete ser dura y enfrentan varios desafíos. Carlos Álvarez se ha convertido en un pilar fundamental, y su futuro está atado al desempeño del equipo: si logran mantener la categoría, es probable que siga para liderar a los granotas, pero de no ser así, otros clubes en Europa ya han mostrado interés en hacerse con sus servicios.
El panorama es incierto y todos los elementos apuntan a que las próximas semanas serán decisivas. Mientras el Levante UD se esfuerza por asegurar su lugar en la primera división, la presión por la posible salida de su estrella aumenta. Los aficionados, por su parte, esperan que su equipo pueda mantener a Carlos Álvarez y continuar construyendo un proyecto competitivo, porque el potencial del jugador es innegable y podría ser clave en la lucha por la permanencia.