Ciudad Real ha sido reconocida nuevamente como la capital más segura de Castilla-La Mancha, logrando un descenso del 0,3% en la tasa de criminalidad respecto al año anterior. Esta reducción posiciona a la ciudad como una de las localidades más tranquilas de España, con un notable 38,4% menos de criminalidad en comparación con la media nacional.
El concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Ciudad Real, Ricardo Chamorro, destacó este martes los datos proporcionados por el Ministerio del Interior, que indican que la criminalidad en la capital es un 21,3% inferior a la media de la región. Chamorro atribuyó estos resultados al esfuerzo colaborativo de los agentes de la Policía Local y la Policía Nacional, así como al impulso de medidas de prevención y seguridad dirigidas a proteger a los ciudadanos.
Entre las acciones que han contribuido a esta disminución en la criminalidad se encuentran la ampliación de la plantilla policial con nuevos agentes, la compra de vehículos y la implementación de un equipamiento moderno y especializado. A pesar de los resultados positivos, Chamorro enfatizó que el Ayuntamiento seguirá adoptando nuevas medidas para mantener y mejorar estos logros en seguridad.
Una de las principales iniciativas será el refuerzo de la presencia policial a pie en el centro de la ciudad, complementada con la incorporación de agentes de paisano, lo que permitirá una reacción más ágil ante ciertos delitos. Además, se instalarán cámaras de vigilancia en puntos estratégicos, como el barrio de La Granja, que comenzarán a operar próximamente para prevenir delitos en dicha área.
El concejal también resaltó que, en el barrio de La Granja, se ha aumentado la presencia policial, lo que contribuye a disuadir posibles delitos. «La presencia constante de nuestra Policía Local ayuda siempre a prevenir delitos y su presencia en las calles actúa como medida disuasoria, reduciendo la posibilidad de robos o vandalismo», afirmó Chamorro.
Finalmente, se fortalecerá la colaboración entre la Policía Nacional y la Guardia Civil mediante operativos conjuntos, tal como se realizó en el control de una rave ilegal en el aeropuerto de Ciudad Real, lo que permitirá una coordinación más efectiva entre diferentes cuerpos de seguridad.