El portavoz del equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Ciudad Real, Guillermo Arroyo, ha anunciado en rueda de prensa que la nueva Zona de Bajas Emisiones (ZBE) se circunscribirá a las calles peatonales ya existentes y a nuevas vías que serán peatonalizadas en el centro de la ciudad, una medida que se formalizará con la próxima adjudicación de obras.
El proyecto, que se encuentra en su fase final de planificación, será debatido en el Consejo de Movilidad en septiembre con la presentación del borrador de la nueva ordenanza. Las calles afectadas incluyen Ciruela desde la esquina de calle Tinte en dirección a la plaza del Pilar, avenida del Rey Santo y el pasaje de la Pandorga, así como las calles Juan II, Postas, Reyes y otras en las adyacencias del área delimitada.
Esta definición de la ZBE supone una restricción considerable respecto a la planteada por el anterior equipo de Gobierno formado por PSOE y Ciudadanos, que proponía aplicarla a todo el interior de la ronda de la ciudad. Arroyo ha enfatizado que la nueva ordenanza se ajusta más estrechamente a la realidad y a las necesidades específicas de Ciudad Real, y ha criticado el alcance excesivamente amplio considerado previamente.
En otros asuntos urbanísticos, la Junta de Gobierno Local ha dado luz verde a una nueva ordenanza que procura la simplificación administrativa de licencias urbanísticas, permitiendo agilizar y facilitar los trámites para los ciudadanos. Esta ordenanza, que también será sometida a aprobación en el Pleno de septiembre, promete reducir significativamente los tiempos de procedimiento.
El director general de Urbanismo, David García-Manzanares, presente también en la rueda de prensa, ha subrayado la obsolescencia de la ordenanza anterior, datada de 2005, y la ha contrapuesto a las normativas autonómicas y estatales más recientes. La prometida ordenanza simplificada busca ser puntual y limitarse a lo imprescindible, anteponiendo la comodidad y los intereses de los ciudadanos en la gestión urbanística.