En la sesión ordinaria de diciembre, el Pleno del Ayuntamiento de Ciudad Real ha dado un paso importante al declarar el belenismo como «manifestación cultural y religiosa de especial significación ciudadana e interés general para la ciudad». Esta decisión ha sido respaldada por el consenso de todos los grupos políticos, quienes han expresado su compromiso con el apoyo, la preservación y la promoción de esta tradición.
Con esta declaración, el Ayuntamiento reafirma su respaldo a la tradición belenista local y a la candidatura del belén para ser reconocido como Bien de Interés Cultural por parte de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, así como para ser declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.
En otro punto de la sesión, no prosperó la moción presentada por Ciudadanos que proponía el restablecimiento de los bonos de comercio. La concejal de Promoción Económica, Yolanda Torres, aclaró que en el primer semestre del año en curso sí se habían otorgado bonos, aunque estos se habían cambiado de fecha, y destacó que se implementan campañas de bonos cuando los comercios consideran necesario.
Torres también subrayó la importancia del pequeño comercio en la dinamización de los barrios de la capital y anunció que se está llevando a cabo un estudio desde el IMPEFE, centrado tanto en la oferta como en la demanda, para identificar acciones futuras que ayuden a revitalizar este sector.
En cuanto a la moción de Ciudadanos, su portavoz, Eva María Masías, defendió la necesidad de reintegrar los Bonos Comercio para fomentar la reactivación económica y la fidelización de clientes. Sin embargo, el Partido Popular y Vox votaron en contra, lo que fue criticado por Masías, quien argumentó que esta decisión contradice su supuesto apoyo a emprendedores y pequeñas empresas.
La exalcaldesa de Ciudad Real enfatizó que es esencial recuperar los recursos necesarios para la campaña de Bonos Comercio con el objetivo de fortalecer el comercio local y, con ello, la economía de la ciudad. Masías también señaló la incoherencia de los partidos que rechazaron su moción, argumentando que, con su voto en contra, dejan a los comerciantes desprotegidos y sin herramientas efectivas para competir en el mercado. En cambio, acusó a estas formaciones de optar por el uso de influencers, lo que considera una estrategia ineficaz en comparación con el apoyo directo al comercio local.