En Chiloeches, un municipio guadalajareño sumido en el consternado silencio, vecinos y autoridades han guardado un respetuoso minuto en memoria del matrimonio y su hija que fueron hallados sin vida el pasado sábado en su domicilio de la urbanización Medina Azahara. Las campanadas del reloj acompañaban este acto de recuerdo mientras rostros cargados de tristeza e incredulidad poblaban la concentración del domingo en esta localidad, impactada por el suceso que ocurrió a escasos kilómetros de la capital alcarreña.
La urbanización, hogar de unas 800 familias, vive momentos de profundo pesar y se prepara para otro minuto de silencio convocado por el ayuntamiento. Marcos Cascajero, el regidor en funciones, ha expresado el sentir unánime de repulsa ante cualquier acto de violencia y el deseo del municipio de mostrar su unión y soporte a la familia de las víctimas. En palabras a la prensa, Cascajero compartió el estado de conmoción que aún embarga a la población y el deseo de que los hechos se esclarezcan con prontitud.
Como muestra del dolor que embarga a Chiloeches, el pueblo ha decretado dos días de luto oficial. Las banderas ondean a media asta y se ha suspendido una fiesta programada por la asociación taurina local, en un momento especialmente duro a pocos días de iniciarse las fiestas menores del municipio.
Entre las autoridades que se sumaron al acto conmemorativo se encontraban el presidente de las Cortes y secretario general del PSOE en Guadalajara, Pablo Bellido; la subdelegada del Gobierno, Mercedes Gómez; y el delegado de la Junta, José Luis Escudero, reforzando la presencia institucional en este momento de duelo.
Vecinos como Carmen y Pilar, cuyos familiares conocían a la hija del matrimonio, han expresado su desconcierto y la dificultad para comprender cómo un suceso tan trágico ha podido ocurrir en su tranquila localidad.
La investigación de las tres muertes, marcadas por los indicios de violencia y reveladas tras el incendio de la vivienda alertado por el hijo que ha sobrevivido a la tragedia, sigue bajo la más estricta confidencialidad con el secreto de sumario decretado por la autoridad judicial. Los cuerpos de las víctimas fueron trasladados al Tanatorio de la Ronda Norte en Guadalajara, donde se les realizarán las respectivas autopsias.