El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha ha vuelto a sacar a licitación las obras del centro de salud número 3 de Albacete con un incremento en el precio de salida de un 45% hasta los 5,1 millones de euros.
Según ha explicado en rueda de prensa la portavoz del Gobierno regional, Blanca Fernández, se trata de una obra ya licitada en 2022 con 3,5 millones de euros, pero que quedó desierta, por lo que se aumenta el presupuesto en un 45% toda vez que es «la única manera de que a una empresa le interese acometer la obra».
«Hemos tenido mala suerte pero hemos actuado con rapidez, se ha vuelto a aprobar un nuevo expediente para que la obra sea una realidad», ha dicho.
Una obra que es «una demanda ciudadana» y que viene a actualizar el centro de salud existente, que «se ha quedado pequeño».
El centro atenderá en un nuevo edificio de 1.800 metros cuadrados en el solar de un antiguo colegio para 18.000 tarjetas sanitarias, tal y como ha especificado Fernández.
«Dará solución a espacios insuficientes y a la inexistente accesibilidad del actual centro de salud», ha dicho, añadiendo que el diseño está «consensuado» con profesionales.
Diez unidades de medicina nuclear y de enfermería, dos unidades de pediatría y dos más de enfermería pediátrica, sala de curas, de extracción o de asistencia social para «un centro de salud modernos que responde a criterios del siglo XXI», según Fernández, quien ha pedido «apostar por la sanidad pública de Castilla-La Mancha» por la vía de la alta tecnología, el personal y las nuevas infraestructuras.
En este momento son más de 50 obras puestas en marcha en materia sanitaria, con más de 1.200 millones de euros comprometidos desde 2015, incluyendo los grandes hospitales.
«El esfuerzo en estos ocho años de este Gobierno es notabilísimo y se corresponde con las necesidades del sistema de salud», ha rematado.
DOS ACELERADORES LINEALES
De otro lado, Fernández ha informado de que el Consejo de Gobierno ha aprobado una inversión de 4,2 millones de euros para la adquisición de dos aceleradores lineales para los hospitales de Cuenca y Guadalajara, «una alta tecnología que nos permite realizar tratamientos de radioterapia con máximos niveles de seguridad y de precisión».
«Por fin –ha señalado– completamos con esta decisión que en las cinco provincias de Castilla-La Mancha vaya a haber una unidad radioterápica oncológica, porque era necesario cumplir ese objetivo que se marcó el Gobierno de Page a principio de la legislatura».
Con esta decisión, ha explicado la portavoz gubernamental, «podremos atender a 300 pacientes, aproximadamente, en cada uno de estos hospitales todos los años, evitándoles desplazamientos innecesarios».
Con la compra aprobada este martes en Consejo de Gobierno, Castilla-La Mancha sumará 9 aceleradores lineales.