El desempleo en Castilla-La Mancha ha registrado un incremento en noviembre con un total de 933 personas más sin empleo en comparación con el mes anterior. Sin embargo, Mario Fernández, el secretario general de la Confederación Regional de Empresarios de Castilla-La Mancha (Cecam), ha destacado que aunque este aumento es negativo, el crecimiento del número de desempleados es menor que en años anteriores para el mismo período.
Según se informa en una nota de prensa de la patronal castellanomanchega, a pesar de esta subida en el paro, la afiliación ha experimentado un ascenso con cerca de 1.500 personas más afiliadas a la seguridad social en la región. Estos datos de afiliación sugieren un aspecto positivo en el ámbito laboral de Castilla-La Mancha.
“Estamos frente al quinto mes consecutivo de incremento en la cifra de desempleados en nuestra región, lo cual indica una tendencia negativa”, ha apuntado Fernández. El representante de Cecam ha hecho hincapié en la importancia de observar la evolución del desempleo en los próximos meses, ya que la desaceleración en la creación de empleo se vincula, según él, a mayores cargas y costes para las empresas, lo que las coloca en una situación económica muy difícil.
Además, Fernández ha indicado la necesidad de integrar en el análisis los datos relativos a los contratos fijos discontinuos para obtener una imagen más precisa de la realidad laboral. Con una situación marcada por la incertidumbre tanto en el contexto nacional como internacional, y con unas perspectivas económicas no del todo favorables para el 2024, el secretario general de Cecam hizo un llamado a la acción.
La organización empresarial exhorta a generar una mayor seguridad jurídica que promueva inversiones y fortalezca la confianza empresarial. Desde Cecam se insiste en la necesidad de apoyar a las empresas y trabajadores frente al actual contexto de incertidumbre, promoviendo el crecimiento económico y la creación de empleo de manera sostenida. Se pone énfasis en evitar que las rigideces y el incremento de los costos de operación empresarial obstaculicen el ya vulnerable ritmo de generación de empleo.
