En una reciente reunión de la Confederación Regional de Empresarios de Castilla-La Mancha (Cecam) en Toledo, el presidente Ángel Nicolás transmitió la inquietud del sector ante lo que considera indicios de una desaceleración económica en la región. Durante el encuentro, al que asistió el presidente de la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme), Gerardo Cuerva, Nicolás comparó la economía con un coche que cada año consume más combustible, sugiriendo que la economía regional no marcha como debería.
Nicolás reconoció que, a pesar de que los datos estacionales actuales pueden parecer positivos, la comparación con años anteriores revela una tendencia preocupante. Indicó que las predicciones para el año 2023 no se alinearon con las expectativas iniciales, lo cual ha generado alarma entre las empresas de Castilla-La Mancha. Con un tejido empresarial compuesto en un 99,3 por ciento por pymes y autónomos, el estado de alerta es notorio.
El representante de Cecam hizo hincapié en la solidez del diálogo con el Gobierno regional y las centrales sindicales, facilitando la resolución de problemas a nivel local. No obstante, señaló que este tipo de colaboración se encuentra ausente en cuanto a la legislación proveniente de Madrid. En este escenario, destacó el valioso apoyo de Cepyme, que considera un aliado constante de los empresarios de la región.
Por su parte, Gerardo Cuerva, presidente de Cepyme, enfatizó la importancia de la interacción y el intercambio de experiencias con las pequeñas y medianas empresas, que son las que realmente enfrentan la realidad del mercado día a día. Cuerva sostiene que recoger estos datos es fundamental para defender los intereses empresariales y comprender mejor la situación actual que enfrenta el sector en España.