CCOO ha instado a los empresarios de Castilla-La Mancha a no subestimar el riesgo que implica trabajar en altas temperaturas y a incorporar el estrés térmico en sus planes de prevención. Raquel Payo, secretaria regional de Diálogo Social y Salud Laboral de CCOO, advirtió en una rueda de prensa que esta situación puede provocar «serios daños para la salud». En Castilla-La Mancha, más de 317.000 personas se ven afectadas por este estrés térmico durante el verano.
El sindicato ha destacado que las altas temperaturas representan un riesgo que debe ser abordado, y para ello, iniciará una campaña de asesoramiento en todas sus sedes. Payo mencionó que el año pasado, el 35% de las consultas recibidas en verano estaban relacionadas con el efecto del calor en los trabajadores, y de estas, aproximadamente la mitad resultaron en denuncias.
La campaña se enfocará especialmente en aquellos trabajadores que laboran al aire libre, como los de la construcción, jardinería, mantenimiento de carreteras, agricultura y limpieza viaria, así como en aquellos que se encuentran en espacios cerrados con condiciones de calor extremo. Payo expresó la necesidad de sensibilizar a los trabajadores sobre los riesgos asociados al estrés térmico y de informarles sobre sus derechos.
La representante sindical subrayó la arraigada percepción de que el calor ambiental es un «peligro natural» que debe ser tolerado. Sin embargo, enfatizó que el estrés térmico representa un problema de salud pública que debe ser abordado adecuadamente. En este sentido, mencionó que la Ley 31/1995 de Prevención de Riesgos Laborales obliga a los empresarios a evaluar este riesgo y a desarrollar acciones preventivas, complementándose con el Decreto-ley 4/2023, que regula la prevención de riesgos laborales en casos de altas temperaturas provocadas por fenómenos meteorológicos adversos.
Payo concluyó subrayando la importancia de contar con un plan de prevención que se active cuando la Agencia Estatal de Meteorología emita alertas de nivel rojo o naranja, incluyendo posibles restricciones en las actividades laborales durante las horas de mayor radiación solar.