La Inspección de Trabajo y Seguridad Social ha tomado la decisión de detener la actividad en el Laboratorio de Anatomía Patológica del Hospital Universitario de Toledo. Esta medida se ha adoptado tras la denuncia presentada por el sindicato Comisiones Obreras, que alertó sobre niveles de formaldehído superiores a los permitidos por los estándares de seguridad laboral.
El formaldehído es un compuesto químico utilizado en numerosos procesos industriales y médicos, pero su exposición prolongada está asociada a efectos adversos en la salud, incluyendo un incremento en el riesgo de cáncer. En el ámbito laboral, la legislación vigente establece límites estrictos a su exposición para proteger la salud de los trabajadores.
La suspensión de las actividades en el laboratorio es una acción preventiva destinada a garantizar la seguridad de los profesionales que operan en estas instalaciones. Ahora, el centro hospitalario deberá implementar medidas correctivas para reducir la concentración de formaldehído a niveles seguros antes de poder reanudar su funcionamiento normal.
La paralización del laboratorio podría afectar temporalmente al rendimiento del Hospital Universitario de Toledo en cuanto al procesamiento de muestras y diagnósticos, aspectos que ahora dependerán de las soluciones que se implementen para manejar la situación. Las autoridades pertinentes están colaborando para asegurar que las operaciones puedan reanudarse de manera segura y eficiente lo antes posible.
Fuente: CCOO Castilla-La Mancha
